PRISM es un programa de la NSA para saber qué es lo que hacen ciudadanos del mundo en servicios en internet, y entregar esos datos al gobierno americano. Vamos, espionaje en toda regla.
En el mundo de internet, y si conocéis a Mozilla y cuál es su manifiesto, veréis que una de las claves es:
La seguridad de los usuarios en Internet es fundamental y no debe ser tratada como algo opcional.
Ahora, si vemos a las empresas del ámbito de internet que proporcionan un navegador (usadas perfectamente para rastrear a los usuarios, qué hacen, dar IPs y demás)…
Microsoft. Google. Apple.
E incluso redes sociales, como Facebook; correos electrónicos (Yahoo, Hotmail); mensajería con Skype. Todo, absolutamente todo.
Pero falta alguien. Falta Mozilla. Falta la fundación con una cuota de mercado del navegador del 30%, que antepone los intereses de los usuarios a las de las corporaciones, porque no responde a nadie excepto a ti. Un navegador diferente, una historia diferente, un fin diferente.
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